Esta fotografía de aspecto extraño es en realidad el Golfo de México, visto desde el espacio por el satélite de imágenes Envisat Earth de la ESA. Específicamente, la nave espacial ha recogido enormes líneas de algas Sargassam flotando en las cálidas aguas de la costa de los Estados Unidos.
Para hacer esta observación, Envisat utilizó el espectrómetro de imágenes de resolución media (MERIS), que tiene la capacidad de ver objetos con grandes cantidades de clorofila, en este caso, algas marinas. Dado que las plantas marinas absorben la mitad del dióxido de carbono emitido a la atmósfera, poder rastrear la densidad de la vegetación marina es muy importante para la investigación climática.
Mediante el uso de un nuevo algoritmo de procesamiento, los investigadores ahora están trabajando para calcular las estimaciones globales de la biomasa del sargazo, para ayudar a realizar un seguimiento de su contribución a la productividad oceánica. Esto también les dará la capacidad de detectar cualquier cambio en la biomasa y mejorar los modelos climáticos.
Fuente original: Comunicado de prensa de la ESA